La primera parte tiene como escenario el siglo XIX en la provincia de Entre Ríos y está referida a los inmigrantes pioneros que desembarcaron en la costa del río Uruguay, el 2 de julio de 1857. Hombres y mujeres que lograron hazañas que perdurarían en la historia no sólo de San José sino de la Argentina toda: el primer Tiro Federal de Sudamérica -el "Tiro Suizo de la Colonia San José"- y el primer Registro Civil del país funcionando a pleno en Colón, la ciudad-puerto de la Colonia San José. La filosofía de François Fourier en la campiña entrerriana; la aventura educativa de un cura soñador. Una producción de vinos en Entre Ríos que mereció los más altos premios en muestras nacionales e internacionales, la fundación de la primera iglesia evangélica en la provincia autorizada oficialmente.
La segunda parte da cuenta de las realizaciones que suma el siglo XX: entre otras, la inauguración de la estación ferroviaria San José del ferrocarril Nord-Este Argentino, el Museo Histórico Regional de la Colonia San José -saludado por el diario La Nación de Buenos Aires como "un modelo de museo"- y el emplazamiento del centro turístico El Palmar, de Colón.
La tercera parte del libro narra el reencuentro de los descendientes de los fundadores con sus propias raíces.Guionet une esa grandeza de la temática a una prosa envolvente y seductora, con un trato y una originalidad que no cesan de sorprender. Este libro es otra forma de contar la historia.
La autora nos dice en el primer capítulo de la obra: "El placer de recordar, escribiendo, es la razón de los capítulos siguientes". De esta forma, recrea la historia de la Colonia San José, Provincia de Entre Ríos, y sus habitantes, en su origen franceses, suizos, alemanes y piamonteses, fruto de las corrientes inmigratorias del siglo pasado. A través de sus distintos capítulos, "Chacras", "En torno a los animales", "Hogareñas" y "Sociabilidad", la autora nos traza un panorama de la vida en la Colonia y muestra cómo las costumbres europeas son transplantadas al nuevo medio, aunque deben aceptar modalidades del país adoptado.